En medio del repudio por el ataque a un hospital infantil en Mariupol, las columnas del ejército de Rusia se acercan a la capital.
Los soldados rusos llegaron hasta las cercanías de Kiev, mientras que el ejército ucraniano redobla sus esfuerzos para evacuar a civiles de zonas urbanas asediadas como Mariúpol, en el sureste del país.
Las columnas de blindados de Rusia, que hace cinco días se encontraban a unos cientos de kilómetros al noreste de Kiev, se hallaban a 15 kilómetros.
Al mismo tiempo, el ejército ucraniano reforzó las defensas en localidades cercanas, en busca de frenar el avance del convoy enviado por el Kremlin.
Mientras las tropas rusas se acercan a Kiev, en Mariupol hubo al menos 17 adultos heridos tras el bombardeo a un hospital pediátrico. El responsable regional, Pavlo Kirilenko, precisó que ningún niño resultó damnificado.
“Es atroz ver el uso bárbaro de la fuerza militar contra civiles inocentes en un país soberano”, reaccionó la Casa Blanca, mientras el primer ministro británico, Boris Johnson, calificó este ataque de “inmoral”.
La ONU, por su parte, pidió “el cese inmediato de los ataques a las instalaciones de salud, hospitales, trabajadores de la salud, ambulancias”.
Más Noticias
Al menos 13 muertos en Brasil tras un enfrentamiento con la Policía
Rusia volvió a sembrar la muerte en Kiev con aviones no tripulados
La corte brasileña se expedirá sobre el cultivo de cannabis y podría abrir la puerta a la plantación